sábado, 5 de octubre de 2019

NINA Y NINO, LOS UNICORNIOS Y EL HADA DEL BOSQUE

Erase una vez, dos unicornios que vivían en el bosque junto a su madre y sus amigos. Sus nombres eran Nina y Nino, ellos eran hermanos. Se pasaban horas y horas jugando en el bosque. Su madre siempre les decía:
- No os alejéis mucho, pues hay animales muy peligrosos.
- Si, mamá. Tranquila no nos adentraremos en el bosque.
Pero ellos no la hicieron caso y comenzaron a caminar, a caminar y a caminar. Sin darse cuenta se metieron mucho en el bosque. Nina que era la más pequeña, le comentó a su hermano:
- Nino, creo que nos hemos alejado mucho y ahora, ¿ Cómo vamos a volver?.
- Pues regresando por el camino que hemos venido.
Pero claro, estában totalmente desorientados. Pues no sabían porque camino habían ido.
Llegó la noche, su madre estába  ya muy preocupada porque veía que no regresaban.
Los dos hermanos estaban con mucho miedo. Oían toda clase de ruidos de animales. Pero no identificaban los animales que eran.
Nino, era un unicornio muy valiente y le comentó a su hermana:
- Tranquila Nina, que si aparece un animal peligroso y feroz,  yo te defenderé.
Ella se quedó más tranquila cuando su hermano le dijo eso.
Pero de repente, escucharon el rugir de un león y a un buho.
La unicornio tenía mucho miedo y temblaba de frío. Su hermano le dijo que tenían que buscar una cueva o algún otro sitio para resguardarse del frio. Pero ella estaba tan cansada que no podía seguir.
Nano le comentaba:
- Vamos, Nina. Tenemos que seguir, no nos podemos parar. Pues podríamos morir de frío.
Al final, como vió que su hermana no podía seguir, se quedaron a dormir debajo de unos árboles.
El unicornio fué a buscar palos para hacer una hogera. Su madre se lo había enseñado muchas veces. Pero su hermana no se quería quedar sola , así que decidió irse con él y entre los dos cogieron muchas ramas para hacer fuego.
Nino, hizo el fuego tal como se lo había enseñado su madre.
Se echaron debajo de los árboles y en ésto oyeron los pasos y el rugir de un feroz y hambriento león. Después escucharon al buho y tanto miedo tenían que volvieron a ponerse de pié.
El león se fué acercando a ellos poco a poco. Los dos hermanos temblaban y sin querer, la unicornio pegó un grito. Ella pensaba que si pegaba el grito el león se iría. Pero no fué así, él siguió acercándose a ellos.
El Hada del Bosque que habí escuchado esos gritos tan desesperados se echo a volar y fué a parar a donde estaban los dos hermanos.
- Pero, ¿ Quién ha sido la que me ha despertado de mi maravilloso sueño con su espeluznante chillido?.
- Perdone usted, señora Hada. Es que mire usted este león. Nos quiere comer.
- Este león, no os hará nada. Es muy dócil, ¿ Verdad, señor león?.
El animal al ver al Hada del bosque dió marcha atrás y se fue.
Ella les preguntó:
- ¿ Como os llamáis y qué hacéis aquí?. ¿ No véis que corréis peligro?.
- Nos llamamos Nina y el es mi hermano Nino. Comenzamos a caminar y a caminar y nos hemos adentrado mucho en el bosque. Ahora no sabemos cuál era el camino de regreso.
- No os preocupéis, yo me conozco todo el bosque. Por eso me llaman el Hada de l Bosque. Yo ayudo a toda clase de animales y además tengo poderes mágicos. Os acompañaré, ya que vuestra madre estará muy preocupada.
El hada, les condujo al camino adecuado y siguieron todos juntos hasta que de pronto vieron unas luces. Su mamá había puesto unas luces en la entrada de la casa por a sus hijos les daba por volver.
Ella los estaba esperando con mucha ansiedad.
- Bueno, pequeños unicornios. Ahí tenéis ya vuestra casa. Id y darle una sorpresa a vuestra madre.
Ellos se despidieron con mucha tristeza de su amiga y se marcharon corriendo a besar a su mamá.
Por fín, volvieron a estar los tres juntos y todo gracias al hada del Bosque.
Su madre miró hacia arriba y le dió las gracias por a ver traido de vuelta, sanos y salvos a sus dos pequeños.
El hada del bosque esparció sobre la casa y sobre sus amigos unos polvos mágicos. La casa brillaba y los otros animales se acercaban para ver lo bonita que era.
Mientras los tres unicornios consiguieron volar. Todo gracias a su amiga el hada.
Estaban encantados porque desde allí arriba podían ver los distintos animales que habitaban en el bosque

No hay comentarios:

Publicar un comentario