LA BRUJA CORUJA NOS CUENTA LAS AVENTURAS DE LA BRUJA BRUJILDA Y LA BRUJA URSULA. Y EL MAGO YAGO

Buenos días chicos, seguro que ya sabéis quien soy. Si mi nombre es la Bruja Coruja y vengo muy bien acompañada. Pero chicos, ¿ No escucháis a alguien discutir?. Esperad, creo que están en esta caja. A ver, todos sentados no os mováis por favor. Aquí hay dos brujas una llamada Ursula y la otra Brujilda. Pero, ¿Que os pasa a vosotras dos?. 

-Qué la bruja Úrsula me estába metiendo su escoba en la boca

- Y tú Brujilda me lo estábas metiendo en los ojos.

Vamos a ver, no os peleeis que hay unos niños que han venido a veros y ha  escuchar vuestro cuento.

- Puedo empezar yo y que luego siga ella.

- Está bien, para que veas lo buena que soy Úrsula que te dejo contarlo.

El otro día estábamos en nuestra casa haciendo nuestra pócima y nuestro té de distintos sabores. De repente alguien llamo a la puerta. Brujilda fué a abrirla y allí estában unos niños disfrazados de Calaveras, de barcos y de piratas. Venían a pedirnos caramelos, pero no teníamos ni idea de lo que era eso que nos pedían. ¿Vosotros sabéis que son caramelos?. Sólo nos dedicábamos ha hacer pócimas y tés. Además nos asustamos mucho. Les echamos a escobazos y se fueron.

-Bueno Úrsula, me voy a dar una vuelta. ¿Te vienes a dar una vuelta conmigo?.

- No, yo me iré a casa a seguir con mi pocima.

Mientras Brujilda se fué a dar la vuelta. Úrsula se volvió a casa y cuando estába allí. Alguien volvió a llamar a la puerta.

- Pero bueno, ahora quien será el que llama a mi casa. No será Brujilda que se le ha olvidado algo. 

¿Quién es el que me viene a molestar?

- Soy el Mago Yago, vengo para hacerte algunos trucos de magia.

- Está bién, pasa, pero te lo advierto como tu truco te salga mal te convertiré en ratón

- Tranquila Bruja Úrsula, que me va a salir muy bien.

- Eso espero, porque si no ya lo sabes.

Al Mago Yago le salió muy bien el truco y la Bruja Úrsula le invitó a comer. Después de comer el mago le volvió a decirle:

- ¿ Quieres que te haga otro truco de magia?.

- Esta bién pero te lo sigo diciendo, si te sale mal te convertiré en ratón.

Al pobre Mago Yago. ¿ Sabéis  lo que le pasó que esta vez el truco le salió mal pero que muy mal?.

Entonces la Bruja Úrsula cumplió con lo que le había dicho. Le convirtió nada menos que en un feo ratón.

Pero chicos, fijaros la Bruja Úrsula convirtió al mago en Ratón y el como es mago en vez de la pocima que tenía. Me ha dejado otra cosa. Ahora, como yo tambien soy una bruja os convertiré en unos deliciosos ratones y os meteré en mi rica pócima.

Colorín Colorete por la Chimenéa sale un Cohete

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LA CASTAÑERA, LOS CARACOLES Y LAS CASTAÑAS

¡ Hola, hola, hola!, pero que niños más guapos. ¿Estáis todos bién?. Yo estoy bién un poco sorda y con dolor de piernas, pero es normal. A mi edad, que le voy a pedir. Pero ahí sigo, ya lo veis.

¿Sabéis quién soy?. Muy bien, soy una Castañera. Mi nombre es María y soy la castañera, vivo en esta casa, como veis no es muy grande pero bueno, vivo en ella muy bien.

¿ Queréis saber lo que hago todas las mañanas?. Pues me levanto pronto y me dirijo al bosque para coger castañas. Las aso en la sartén y luego las vendo en el pueblo a los niños que se acercan.

Pues el otro día me pasó algo muy extraño. Fui al bosque a coger castañas, con mi cestita. Mientras íba me encontré con  un lindo conejo que saltaba yo me quedé mirándole. Es que me gustan mucho los conejos y era  tan bonito, que me dieron ganas de cogerlo. Pero me dije:
- Dejalo que se vaya, que tienes que hacer un montón de cosas todavía.
Yo seguí mi camino y me encontré con mi amiga Ana. Nos pusimos hablar de nuestras cosas y le comenté que tenía que ir a por castañas para ir después al pueblo a venderlas.
Cuando por fín llegué, comencé a cogerlas y las metí en mi cestita y me fuí con ellas a mi casa. Pero al llegar ví que algo pasaba, las castañas se movían. Volví a mirar y comenté:

- ¡ Oh!. ¡ Pero estos no son castañas!. Son Caracoles. Otra vez, tengo que ir al bosque a coger castañas. Sacaré esos extraños caracoles y los pondré en  mi jardín. ¿ Queréis que le cantemos su canción?.

Caracol, col, col

Saca los cuernos al sol,

que tu padre y tu madre,

ya los sacó

Otra vez, a subir al bosque, con lo cansada que estoy. Esto de no ver bien. Páginas

Subí otra vez al bosque con mi cestita y esta vez si cogí castañas. Las metí dentro y me volví para casa. Todas las que cogí las asé y las metí calentitas en un recipiente, para bajarlas al pueblo y para que no perdiesen el calor

- Vendo castañas, a las ricas castañas, recién calentitas. ¿ Quién quiere castañas?. Recien hechas, os gustarán.

¿ Cantámos mi canción?. Esa que os la sabéis muy bién. Que dice así:

Cuando es tiempo de las castañas,

la castañera, la castañera,

baja desde la montaña,

hasta la escuela, hasta la escuela.

La camisa le va pequeña,

la faldita le hace campana,

los zapatos le hacen clón-clón

y al bailar se ríe un montón.

Las castañas están muy ricas,

las castañas están muy buenas,

las comemos todos juntitos, 

las castañas saben muy bien
¡Ah! Y se me olvidaba. Como la Castañera no quería que le volviera a ocurrir lo mismo y coger de nuevo por equivocación a los indefensos caracoles, con lo agustito que estaban ellos. Prometió que al día siguiente iría a comprar unas gafas y así no volver a asustar más a los animalitos que viven en el bosque.
MORALEJA:
Hay que respetar a los animales.

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